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La exposición solar es la principal responsable de la aparición de melanomas. De hecho la incidencia de éstos aumentan en España un 10% cada año.
De ahí dejar bien claro y desmontar algunas creencias relativas a la protección solar para evitar su aparición y su consecuente conversión en el cáncer de piel.
FALSOS MITOS
1- La piel morena o bronceada ya no necesita protección solar: FALSO.
La primera barrera de la piel está más protegida pero la radiación UVA atraviesa la epidermis y penetra hasta la dermis produciendo mutaciones y el consiguiente riesgo de malignificación celular.
2- Los días nublados no es necesario protegerse del sol: FALSO
Los dias con nubes pasa una parte solo de la radiación pero al disminuir la sensación de calor suele aumentar el tiempo que estamos expuestos a él y el consecuente riesgo de sobre-exposición.
3- Debajo de la sombrilla no se necesita usar fotoprotectores: FALSO
Aunque no percibamos sensación de calor, ésto no es sinonimo de no radiación. La arena (que en realidad son pequeños cristales) refleja hasta un 20% de la radiacion que recibe.
4- La proteción con un filtro alto i,de lámpara síntesis de vitamina D: FALSO
No es cierto ya que la exposición de una mínima parte del cuerpo al sol (por ejemplo la nuca, los empeines, las orejas...) ya son suficientes para permitir la síntesis de la vit D tan necesria para nuestro sistema inmune, estado de ánimo, fijación de Calcio a los huesos o incluso fertilidad.
5- Mientras se está dentro del agua no hay riesgo de quemaduras: FALSO
Al nadar el agua hace efecto lupa y aumenta la radiación que incide en nuestra piel y además permanecemos más tiempo expuestos al no sentir calor.
6- El fotoprotector alto impide el bronceado: FALSO
Esta aseveración es falsa ya que NINGUN protector solar bloquea al 100% la radiación. Lo que sí es cierto es que tardará más tiempo en tener color la piel, será más lento y progresivo el bronceado.
7- Los fotoprotectores resistentes al agua no necesitan ser reaplicados despues del baño: FALSO
El agua, aunque estos productos sean waterproof, los diluye y modifica su uníformidad en la piel por lo que hay que reaplicarlos cada 2 horas como mínimo.
8- El sol cura el acné: FALSO
No lo cura, seca los granos de manera pasajera pero si se interrrumpen los tratamientos ( las isotretinoínas deben suspenderse en verano por su fotosensibilisad) y la exposición solar ha sido excesiva, en otoño se produce un rebote.
9- Los rayos UVA de las cabinas son menos dañinos que la radiación solar y no producen quemaduras: FALSO
Estas radiaciones son igualmente Ultravioletas y pueden dañar la piel de la misma manera que la solar. De hecho, estudios de la OMS desaconsejan estas prácticas en menores de 18 años por el efecto memoria de la piel y la aparición de cáncer de piel en la edad adulta.
10- Si se utiliza protector solar puede aplicarse perfumes para ir a la playa o piscina: FALSO
La mayoría de los perfumes contienen alcohol y otros agentes fotosensibilizadores y la poca radiación que incide en la piel es suficiente para desencadenar una reacción.
10+1- Los Autobronceadores protegen del sol: FALSO
Los autobronceadores propiamente dicho no protegen del sol, sólo estimulan la síntesis de melanina. Otros proporcionan ese color dorado a la piel por la reacción con la queratina de la epidermis pero si se dejan de aplicar, en 3 o 4 días desaparece por la eliminación natural de las células de la capa córnea. Lo denominamos 10+1 porque existen algunos como el nuevo de Isdin Hidro Oil 30+ que además de favorecer el bronceado contiene un filtro SPF 30 y éste SI que protege del sol aunque no en gran medida ya que es un filtro medio.
CUIDADOS DE NUESTRA PIEL DESPUÉS DE LA EXPOSICIÓN SOLAR
Tras la exposición al sol nuestro cuerpo sufre una serie de daños que hay que reparar, a pesar de la utilización de los imprescindibles fotoprotectores extremos. La radiación solar provoca la formación de radicales libres con el consiguiente proceso de envejecimiento celular y la deshidratación. Asimismo tanto la sal como el cloro pueden provocar reacciones irritativas, dermatitis que conviene reparar.
El primer paso a seguir es la ducha post-solar para eliminar los restos de sal, hipoclorito o de cosméticos protectores solares (aceites, cremas...). Esta debe hacerse lo más fría posible para favorecer la circulación (por vasoconstricción) y porque el agua caliente deshidrata la piel, potencia su descamación y en consecuencia acorta el bronceado. A continuación se debe reparar el cuerpo con un aftersun: este tipo de cosmético es más adecuado que la hidratante corporal diaria ya que incorpora activos que calman la irritación y repara los daños (vitamina E) además de aportar agua a la piel deshidratada.
Para conseguir un rostro luminoso y uniforme es recomendable la exfoliación una vez a la semana o cada quince días y siempre por la noche. Los más indicados son los mecánicos de arista suave (albaricoque por ejemplo) para no lesionar aún más la piel con exfoliantes químicos. A continuación debe aplicar una mascarilla rica en vitamina C que es iluminadora, evita la formación de radicales libres, unifica el tono y favorece la síntesis de colágeno (el esqueleto de nuestra piel) que evita la flacidez y el descolgamiento.
La HIDRATACION es básica para todo el organismo y en concreto también para la piel. Es recomendable beber unos
2,5 litros de agua diarios que también se notarán en nuestro rostro. La aplicación de mascarillas de ácido HIALURONICO por las noches contribuirán a retener el agua durante más tiempo y evitar que se descame perdiendo por tanto el bronceado.
La intensa radiación lumínica del verano junto con el aumento de horas de sol y la exposición prolongada pueden dañar nuestros ojos. Las piscinas, el agua del mar y la altitud en las excursiones a la montaña además de la disminución de la capa de ozono han hecho que aumenten las enfermedades oculares como la querato-conjuntivitis actínica, las degeneraciones retinianas o las úlceras corneales.
Por eso el uso de gafas de sol de calidad es un accesorio que va más allá de la moda. Deben cumplir ciertos requisitos como:
-Cumplir el estandard europeo con un grado de absorción especificado (0-4).
-Bloquear el paso de la luz al menos un 75%.
-Los cristales deben llevar filtros de radiación UVA y evitar su paso al menos un 95%.
-Especificar la marca CE como estandard de calidad.
En el caso de piscinas ciertos elementos como el cobre o el cloro pueden producir irritación o conjuntivitis al igual que derivados del petróleo en el mar por lo que es recomendable el uso de gafas de natación homologadas.
NUTRICOSMETICA POTENCIADORA DEL BRONCEADO
Sabemos los riesgos de la radiación solar y de las precauciones que deben tenerse en cuenta al exponerse al sol, por eso existen muchos productos enfocados a prevenir las lesiones cutáneas solares además de las cremas fotoprotectores: cápsulas formuladas con potentes antioxidantes que protegen el organismo de la oxidación producida por el sol y que potencian el bronceado dando una luminosidad y un aspecto muy saludable a nuestra piel.
Entre los compuestos que lo integran están entre otros el LICOPENO (presente en tomate o sandía),el ACEITE DE BORRAJA y el ÁCIDO ELAGICO (extraído de la granada).
• LICOPENO : es un caroteno que se encuentra en tomates y frutas y verduras rojas. Se incorpora a complementos dietéticos y nutricosmética por sus importantes propiedades antioxidantes. Actúa protegiendo las células humanas del estrés oxidativo originado por los radicales libres y que es el responsable de enfermedades cardiovasculares, cáncer y envejecimiento. Se ha demostrado tras su uso la regresión de lesiones cancerosas de próstata además de prevenir el síndrome de degeneración macular, principal causa de ceguera en mayores de 65 años.
• ACEITE DE BORRAJA: se extrae de las semillas de la borraja, una planta de flores estrelladas azules originarias de Siria. Es un potente antioxidante además de aportar hidratación y rejuvenecimiento de la piel gracias a sus ácidos grasos esenciales. Así es eficaz en el tratamiento de eccemas, psoriasis o dermatitis atópica.
• Acido ELAGICO: es un polifenol que se obtiene de la granada. Protege muchas plantas de la luz UV, virus, bacterias y parásitos.
Además de potenciar el bronceado, estos productos estimulan la producción de melanina, pigmento natural fabricado por las células de nuestra piel llamadas melanocitos por lo que supone una protección adicional ante quemaduras o alergias solares. Para optimizar este efecto deberán tomarse por lo menos 15 días antes de la exposición solar.
NUTRICOSMETICA POTENCIADORA DEL BRONCEADO
Sabemos los riesgos de la radiación solar y de las precauciones que deben tenerse en cuenta al exponerse al sol, por eso existen muchos productos enfocados a prevenir las lesiones cutáneas solares además de las cremas fotoprotectores: cápsulas formuladas con potentes antioxidantes que protegen el organismo de la oxidación producida por el sol y que potencian el bronceado dando una luminosidad y un aspecto muy saludable a nuestra piel.
Entre los compuestos que lo integran están entre otros el LICOPENO (presente en tomate o sandía),el ACEITE DE BORRAJA y el ÁCIDO ELAGICO (extraído de la granada).
• LICOPENO : es un caroteno que se encuentra en tomates y frutas y verduras rojas. Se incorpora a complementos dietéticos y nutricosmética por sus importantes propiedades antioxidantes. Actúa protegiendo las células humanas del estrés oxidativo originado por los radicales libres y que es el responsable de enfermedades cardiovasculares, cáncer y envejecimiento. Se ha demostrado tras su uso la regresión de lesiones cancerosas de próstata además de prevenir el síndrome de degeneración macular, principal causa de ceguera en mayores de 65 años.
• ACEITE DE BORRAJA: se extrae de las semillas de la borraja, una planta de flores estrelladas azules originarias de Siria. Es un potente antioxidante además de aportar hidratación y rejuvenecimiento de la piel gracias a sus ácidos grasos esenciales. Así es eficaz en el tratamiento de eccemas, psoriasis o dermatitis atópica.
• Acido ELAGICO: es un polifenol que se obtiene de la granada. Protege muchas plantas de la luz UV, virus, bacterias y parásitos.
Además de potenciar el bronceado, estos productos estimulan la producción de melanina, pigmento natural fabricado por las células de nuestra piel llamadas melanocitos por lo que supone una protección adicional ante quemaduras o alergias solares. Para optimizar este efecto deberán tomarse por lo menos 15 días antes de la exposición solar.